La Academia derrotó 2 a 1 a Boca, y se quedó con la Supercopa.
¡Racing campeón! es un grito que vuelve a repetirse y se vuelve una costumbre. La Academia derrotó a Boca por 2 a 1 y se quedó con la Supercopa Internacional.
El equipo de Fernando Gago jugó un partido correcto en lineas generales, en dónde el equipo priorizó mantener equilibrado el desarrollo, y apostar a los hombres de ataque.
Gran partido de Johan Carbonero quién convirtió un gol y desequilibró permanentemente, y de Maximiliano Moralez que parece ser la nueva manija de este equipo.
El encuentro comenzó con un Boca activo, que se puso en ventaja rápido a través de Roncaglia, aunque tres minutos después, la dupla Carbonero – Moralez empató el encuentro.
De ahí en adelante el desarrollo fue parejo, con una leve ventaja para el equipo de Gago. Para el segundo tiempo, el DT Xeneize metió mano en el equipo y agregó un volante.
Más allá de que el conjunto de la Ribera insinuó dominar, el encuentro siguió muy parejo y los ataques se basaban en algunas individualidades, sobre todo de Carbonero.
Cuando el partido se terminaba llegó la jugada polémica del partido, Jonathan Gómez ingresó al área, y el árbitro indicó el punto del penal.
Esta vez, Gonzalo Piovi se hizo cargo de ejecutar el penal y cumplió con sus dichos en el doloroso penal ante River, cuando dijo: «Le rompo el arco».
Racing gana un título en el primer partido del año, un logro que seguramente sea un motor de cara a los competencias que debe afrontar el equipo.
¡Racing campeón! es el grito que se escucha en Abu Dhabi y que se hace costumbre por Avellaneda, es un buen síntoma.