Su hijo debutó anoche en el partido frente a Tigre en el Cilindro. Se fue llorando de la cancha y consolado por Pol Fernández.
Nicolás Muscio es uno de los mejores amigos de Matías Zaracho. Cada vez que tenía la oportunidad nombraba que su sueño era jugar con él en la primera de Racing. Ambas familias son muy amigas y los dos están desde muy chicos en el club.
En la victoria frente a Tigre, el juvenil ingresó a los 32′ del complemento por Nery Domínguez. Se lo notó algo nervioso y en el gol de Tigre no llegó a cabecear, en la jugada que Vigliano no vio falta. Se fue muy triste al vestuario cuando terminó el partido.
Su padre habló en Racingmaníacos Radio (FM Secla 106.1) y contó sus sensaciones en la previa: «Ya verlo en la lista me emociona, quiero que disfrute todo lo que está viviendo”. Además, contó a quién tiene de ídolo: «Mi hijo se volvía loco por jugar con Lisandro López, lo tiene en lo más alto. De chiquito lo dibujaba”.
Su relación con Zaracho viene de hace muchos años y dijo que «la familia, el acompañamiento y el estudio hacen que tu hijo salga como un Matías, con los pies sobre la tierra”. Por último, contó como lo ve a su hijo en esta nueva etapa: «Siempre uno apoya a su hijo, nunca dejó de entrenar, siempre se mató y es un chico muy aplicado», cerró.
Muscio fue el jugador número 79 surgido del predio Tita en debutar en la primera del club (Fuente: @ElMetodoRacing). Condiciones tiene y ojalá las pueda demostrar.